Chaque sourire est spécial.

martes, 21 de agosto de 2012

Que por una vez, sea la historia que yo quiero.


Despertarme por un puto día y saber que todas las imágenes que han pasado por mi cabeza de los dos juntos no han sido un sueño, solo recuerdos del día anterior. Sonreír cuando te vea y rápidamente disimular para que nadie de nuestro alrededor lo note. Estar siempre en el mismo lugar, a la misma hora y con la misma compañía, tú y yo. Que llegue el día en el que la gente importe una mierda y de repente delante de todos besarte, susurrarte que te echo de menos y acariciarte la mejilla. Que todas y cada una de las promesas se cumplan sin peros ni condiciones. Que el mejor plan para un viernes sea una película cualquiera en un salón con palomitas y tú. Que la estampa más bonita sea verte despertar al amanecer. Que jugar al escondite se convierta en: te busco, me tapas los ojos y me besas en el cuello. Que haya un día en cada mes en el que solo existamos los dos y este prohibido no pasarlo juntos. Que me digas cualquier cursilada y yo como una enamorada de la vida gritar: tengo al mejor novio del mundo. Que esto empiece, pero sin para siempres ni nuncas, simplemente, hasta que el destino lo prefiera.

viernes, 10 de agosto de 2012

No necesito más.



Odio a la gente que dice que si el chico que le gusta pasa de ella se muere o a la inversa, sinceramente pienso que eso no lo es todo, un simple tío nunca te va a dar las sonrisas que te da una niña pequeña cuando te mira, ni las ganas de fiesta con las que tus amigas te vuelven loca. 

Para mí, lo más importante es mi familia, sabes? Algunos dicen que soy afortunada por no tener hermanos, de pequeña pensaba que no, que ser hija única era una mierda, no tenias con quien jugar en casa ni siquiera con quien discutir; ahora pienso que no me hace falta tener ningún hermano, para mí, ellos y ellas son mis hermanas. 
Esos que me han visto nacer y que me consentían, los que me querían coger en brazos pero solo les dejaba cuando venia el perro y me daba miedo, esos que también me dejaban de lado cuando hablaban de ''cosas de mayores'' pero yo seguía dando por culo y no se cabreaban, esos que se quedaban conmigo la noche de reyes hasta que todos los papis ponían los regalos en el campo y se inventaban miles de escusas para que no sospechase nada, esos que ahora que ya he crecido me llevan a casa cuando me aburro, o me invitan a sus cumpleaños o una tarde cualquiera a tomar algo, esos que si se que me pasa algo puedo contar con ellos y esos en los que puedo confiar. Siempre me han dicho, naciste en medio, o todos muy mayores o todos muy pequeños, pero de tu edad? Solo tú. He tenido la suerte de poder disfrutar de diferentes edades, no estaba yo sola de mi edad, siempre estaba la pecoseta esta por ahí. Esa niña que me ponía negra y con la que me peleaba y me peleo bastante. Somos así, nos gusta estar juntas pero no mucho tiempo, al final, terminamos mandándonos a tomar por saco, pero luego se nos pasa. Luego están ellas, mis 4 peques, a las que he visto nacer e ir creciendo. Esa sensación de tenerlas en brazos el día que nacieron no se me va a olvidar nunca. Daria mi vida por cualquiera de ellas, a veces sus gritos y sus llantos por las peleas con los juguetes te cabrean pero llegan y te dicen cualquier tontería y es la mejor sensación que se puede sentir. La primera de las peques nació cuando yo tenía 5 o 6 añitos, a ella no la pude cuidar mucho pero ahora intento hacerlo todo lo que puedo. Las demás son mis nenas bonitas, nació cada una un año después que la anterior; recuerdo que cuando una empezaba a andar la otra estaba en la etapa de despertarse de la siesta llorando e ir a cogerla en brazos e incluso cuando la mas mayor de las 3 empezaba a hablar, nacía la mas pequeñita de todas. La mas pequeñaja, esa que te mira y sientes un cosquilleo que te tranquiliza. La verdad, no necesito ningún hermano o hermana, tengo doce primos increíbles, que es mucho mejor.

jueves, 9 de agosto de 2012

Todas y cada una de ellas, con un significado diferente.



Conozco miles de sonrisas, algunas que sientan mal, otras en cambio que te alegran el día e incluso conozco esas que enamoran en tan solo una milésima de segundo. 
He visto con mis propios ojos a la mejor sonrisa que he podido ver en la vida, esa que desde el primer momento en que la vi me di cuenta de que era la que quería ver durante todas las mañanas cuando amaneciera. He conocido la sensación de tener esa sonrisa de tonta por el simple hecho de pasar al lado suya y mirarle, esa sonrisa extraña pero aun así la mejor de todas por haber pasado toda una noche con él, he sido la mañaca de 15 años más feliz del mundo por pensar que él era el que no se iba a separar de mi nunca, de una manera u otra. 
Soy la niñata de 16 años a la que no le importa lo que venga si sabe que cuenta con su apoyo. Sí, soy la niña caprichosa que cuando dice que algo quiere y va a ser suyo, lo cumple sin pensar en las consecuencias. Soy la que te quiere solo para ella, esa a la que acabaras entregándole tus mejores noches, y enseñándole los mejores atardeceres.